En este caso, podemos ver a una maestra que quiere incorporar a toda costa en su aula las nuevas tecnologías, pensando que va a beneficiar a los alumnos y a ella, la cual está cansada de los recursos tradicionales. Por lo que no tiene presente que no hay un "supermedio", un único medio óptimo para todo, y que dependiendo de la situación, uno puede ser más acertado que otro.
Se puede decir por tanto, que considera los medios como elementos periféricos al currículum, ya que no los asocia con los objetivos, contenidos, y estrategias instruccionales, sino que presta más atención a lo técnico, que a lo pedagógico. Y esto no debería ser así, pues los medios por sí solos no garantizan la calidad de la enseñanza, deben asociarse a otras innovaciones curriculares, siendo conscientes de que éstos son instrumentos al servicio de una intención pedagógica.
Por ello, es conveniente no olvidar que en la enseñanza no hay nada establecido y fijo, ya que cada niño, cada actividad, cada metodología... en fin cada situación, es diferente, y por ello, el secreto para una buena educación, está en saber escoger los recursos indicados para cada momento.
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